La congestión nasal es causada cuando algo irrita e inflama los tejidos nasales, incluyendo las infecciones (resfriados, gripe, sinusitis), las alergias y otros irritantes (humo) o problemas crónicos como la rinitis no alérgica. Lo mejor para tratar la congestión nasal es usar una combinación de diferentes estrategias de tratamiento, médicas y no médicas, para aliviar los síntomas.
Consejos para prevenir y aliviar la congestión nasal
Mantén los conductos nasales húmedos. Aunque a veces pensamos que el aire seco puede ayudar a aclarar una nariz que moquea , en realidad tiene el efecto opuesto. El secado de las mucosas las irrita aún más. Para mantener los conductos nasales húmedos:
- Reduce la sequedad del ambiente (sobre todo en el dormitorio) con la ayuda de un humidificador.
- Toma duchas largas o respira vapor de agua caliente (pero no demasiado caliente).
- Usa un spray salino nasal. Es agua salada, y ayudará a mantener las fosas nasales húmedas.
- Utiliza un irrigador nasal o una jeringa grande para limpiar las fosas nasales. Usa agua destilada o hervida para formar la solución de riego. Enjuaga el dispositivo después de cada uso y deja que se seque al aire.
- Colócate una toalla caliente y húmeda en la cara. Puede aliviar el malestar y abrir los conductos nasales.
- Respira vahos de eucalipto, especialmente antes de acostarte.
Al dormir, no te coloques en posición horizontal, sino en una postura que permita mantener la cabeza algo elevada (con la ayuda de cojines, por ejemplo).
Bebe muchos líquidos. Esto diluirá el moco, lo que podría ayudar a prevenir los senos bloqueados.
Anticípate a la congestión alérgica en las estaciones del año donde sabes que se inicia la floración de los agentes que provocan tu alergia. Usa mascarilla si es necesario cuando camines por la calle y aplícate los descongestivos y antihistamínicos por anticipado.
Evita el contacto con sustancias que te puedan producir irritación nasal (pelo de mascotas, polvo, productos con olores fuertes…).
No fumes ni permanezcas en ambientes con humo.
Lávate las manos con frecuencia.
Si sigues estos consejos y tu congestión nasal no mejora, recuerda que en la farmacia hay un gran surtido de medicamentos de venta libre para tus síntomas. ¡¡Pregúntanos!!
- Sprays nasales descongestivos (Oximetazolina, fenilefrina, xilometazolina,…). Si te excedes en su uso tu congestión puede empeorar, lo que se conoce como efecto rebote. No deben usarse más de tres días seguidos.
- Comprimidos descongestionantes y antihistamínicos.
¿Cuándo acudir al médico?
- Si la congestión nasal no desaparece en el espacio de 10 días después de usar los tratamientos mencionados anteriormente.
- Si las secreciones nasales cambian de color o textura.
- Si aparece fiebre baja o dolor de cabeza. Esto puede indicar una infección sinusal que requiera antibióticos para tratarla.