Te conviene conocer los tipos de medias de compresión en caso de que presentes un problema circulatorio. Tu especialista médico te las puede recomendar para mejorar el flujo sanguíneo en tus piernas y evitar así cualquier aparición de coágulos, que pueden suponer un peligro para tu salud.
¿Para qué sirven las medias de compresión?
Saber para qué sirven las medias de compresión te ayudará a elegir las más apropiadas para ti, en función de tu bienestar. La forma que tienen de actuar es comprimiendo las piernas, logrando que la sangre fluya más fácilmente por ellas. Estas pueden servir como tratamiento o de forma preventiva ante las venas varicosas, especialmente si acabas de pasar por una cirugía y necesitas un reposo relativo o absoluto.
Además de ayudarte con las varices, los diferentes tipos de media de compresión también te pueden servir para calmar el dolor de piernas o evitar la retención de líquidos, que produce una hinchazón evidente en ellas. En el caso de haber pasado por el quirófano, son perfectas para la prevención de la formación de coágulos de sangre, que podrían poner en riesgo tu vida. La misma función realizan ante la falta de movilidad que el paciente tiene que cumplir para recuperarse de una lesión.
No dudes que las medias de compresión son óptimas para evitar el síndrome posflebítico, que es un estado agravante que causa coágulos e hinchazón en las piernas. Según tu estado y la finalidad que requieras con ellas, el especialista te puede recomendar el uso de un tipo u otro.
Diferentes tipos de medias de compresión y sus principales funciones
Entre los distintos tipos de medias de compresión, destacan características como el nivel de presión, el largo de estas y, por qué no, los colores que puedes elegir para combinarlas con tus conjuntos de ropa.
Medias según su grado de compresión
Puedes encontrar medias de distinta presión, que puedes usar según las varices que estén presentes o si requieres descansar tus piernas. Estos son los tres grados de compresión que puedes encontrar:
- Medias de compresión leve: con una compresión de 8 a 18 mm Hg, son recomendadas para las varices en su inicio. También pueden usarse en la actividad deportiva o para mitigar el cansancio en las piernas.
- Medias de compresión media: con una compresión de 18 a 32 mm Hg, son recomendadas ante la hinchazón que producen las varices moderadas. Te pueden dar alivio ante la inflamación que se produce en los tobillos.
- Medias de compresión fuerte: con una compresión superior a 32 mm Hg, se recomiendan ante la presencia de signos que alertan de una falta de circulación, como son el oscurecimiento de la piel y las rojeces en esta. En el caso de las varices, deben ponerse ante un grado severo.
H3:Medias según la medida
La medida de las medias debes seleccionarla mirando el área de tus piernas que deseas tratar. Esta puede presentar venas varicosas a las que puedes comprimir, para conseguir una mayor circulación sanguínea y evitar así posibles coágulos o el avance a un estado más grave. Estas son las opciones que puedes comprar:
- Medias hasta la rodilla: indicadas para unas varices leves y localizadas en la pierna.
- Medias hasta el muslo: aquí encuentras varios tipos, como las que llegan a mitad del muslo o las que lo cubren completamente, en función a la aparición de las varices.
- Medias tipo panty: consiguen su sujeción a la altura del abdomen y son perfectas para lograr un mejor resultado en toda la pierna.
Ahora que conoces los tipos de medias de compresión, ya puedes elegir cuáles son las más indicadas para tu caso. Siempre es mejor consultar con tu médico, para que te recomiende unas apropiadas para ti.